Hay que tener un cambio de mentalidad. Se trata de adquirir nuevos hábitos para una alimentación correcta de por vida, tras haber perdido eso kilos de más. Excepcionalmente y en ocasiones especiales, podrá haber días de excesos, pero no como rutina diaria. La dieta cotidiana debe de ser sana y moderada, y el ejercicio físico no debería faltar en nuestra rutina.
Por ello, es tan importante el concepto de reeducación alimentaria. Hay que volver a los hábitos higieno-dietéticos sanos, a nuestra dieta mediterránea. No debemos permitir que el estrés, el trabajo, la vida social o familiar, nos aparten de la salud.
Somos lo que comemos,
y a través de una alimentación correcta, podemos potenciar nuestra energía física y psíquica. El alimento es vida, y si sabemos elegir bien nuestros alimentos, aportaremos además de energía, antioxidantes, vitaminas, minerales, fibras, proteínas y ácidos grasos esenciales, ayudando así a nuestro organismo no sólo a funcionar bien, sino a mantenerse en salud, y obviamente a mantenerse en peso.
Adiós a la pirámide nutricional
El Gobierno de Obama ha dado un paso más para intentar que la nutrición y la buena alimetanción calen en la sociedad, una tarea bastante difícil. Han creado una imagen más sencilla, un plato donde las cantidades están más claras y todo parece más visual.
Verduras, cereales, proteínas y frutas (en ese orden), acompañados de productos lácteos.
Estos son los mensajes que se lanza: Disfruta la comida pero come menos
§ Evita comer porciones enormes
§ Mezcla hortalizas y frutas en tu plato
§ Introduce cereales integral
§ Bebe agua en lugar de bebidas azucarada
§ Cambia la leche por leche sin grasa
abogo por la dieta mediterránea, por el deporte diario y por el asesoramiento de especialistas... aunque con la dieta mediterránea, la sustitución de bebidas azucaradas carbonatadas(cola, naranja, limón...etc) por agua y el ejercicio diario no hace falta ir a un especialista, sólo tener fuerza de voluntad y constancia... Me ha gustado mucho éste artículo... Felicidades Ana...
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